Opinión de
Tierra
en 19/06/2012
Hola, estuve fuera de la ciudad dos semanas, mi padre quería pasar unos días conmigo, esta bastante enfermo, sabes esos días trate de atenderlo y mimarlo y paso todo lo contrario él se dedico por completo a mí, me atendio como si fuera una niña pequeña, no me dejo hacer nada, preparaba el desayuno todos los días, pasábamos horas y horas conversando, la verdad lo sentí muy triste, cansado y su mirada era diferente, sabes, cuando salí de la ducha, me senté en la cama envuelta en la toalla, aplique en mi cabello crema para peinar, mi padre me pidió el peine y empezó a desenredar mi cabello poco, a poco como cuando era niña, créeme en ese momento, la ternura de mi padre me hizo sentir de cinco o seis años, mientras me peinaba preguntaba muchas cosas de mi vida, y el porque de muchas de mis decisiones, ya sentado frente a mí y con cabeza clavada entre sus manos, me dijo entre sollozos ¿ Y, yo, donde estaba hija?.
¡.