Opinión de
María Cecilia Reyes
en 12/04/2014
Contratamos los servicios de Adriana Satisabal con aproximadamente un año de anticipación a nuestra boda. Con aproximadamente dos semanas a las fecha del matrimonio, por un desacuerdo sobre las tarifas, porque consideramos que el porcentaje que nos estaban cobrando no era el inicialmente acordado, la señora Satisabal decidió terminar el contrato de prestación de servicios y nos proseguir con la preparación y organización de nuestro matrimonio, lo cual obviamente causo perjuicios, inconvenientes y la necesidad de buscar a otra persona en Cartagena que nos ayudara con la boda (Tatiana Taron) quien resulto haciendo todo perfecto y en un tiempo récord. Poco profesionalismo y autocrítica de sus servicios, los cuales por demás no reflejan los precios que cobran por una boda.